El turismo de vacunas es oficial: Me vacuné en Nueva York
El turismo de vacunas es una realidad. Conoce cómo es el proceso para vacunarte en la ciudad de Nueva York. ...
Santo Domingo, Rep. Dominicana
Esto es República Dominicana ¡Ya tú sabe!
Desde que me bajé del avión y tuve el primer contacto con los dominicanos me di cuenta lo rápido que hablan y actúan. Si eres chilango y piensas que somos los más acelerados del mundo, te equivocas. Ellos arreglan las cosas es dos minuto, se desesperan en uno y lo mejor, son directos en lo que te piden, como la señorita del mostrador que me vio fijo a los ojos y me dijo: “Mi amol, no te distraigas y traeme acá tu Tarjeta de Turista o me retrasas toda la fila”. Una energía peculiar que más allá de malinterpretar, entendí con el paso de los días.
De la Tarjeta de Turista parte un tip fundamental: cuando salgas de tu país cambia tus monedas por dólares, ya que en el aeropuerto tienes que pagar este impuesto que República Dominicana cobra a sus visitantes como requisito de ingreso territorial, mismo que te permite quedarte por un lapso de 30 días. El costo es de $10 dólares por persona, y aunque no te dan una tarjeta física ellos registran tu entrada con el pago y te entregan un papel que más tarde das en migración.
En mis traslados me di cuenta que la infraestructura vial de Santo Domingo es súper parecida a la de la Ciudad de México. Nunca había visto una avenida tan similar al Periférico, y a los conductores sufrir -de igual manera que los mexicanos- por el tráfico.
Me quedé en Occidental El Embajador, un hotel más enfocado en los viajeros de negocios y en la organización de eventos. Sus instalaciones son amplias y lo que más me gustó fue el colchón y las almohadas de mi recámara; un enorme detalle que siempre evalúo. Si lo que buscas es dormir y gozar de buenos servicios, este lugar es la opción porque además está ubicado en el corazón de la ciudad. En caso de que busques un hotel en el que quieras descansar y pasar parte de tu estancia, abajo te dejo los datos de más opciones.
Mi recorrido empezó en la Zona Colonial de Santo Domingo de la que sorprendieron mucho sus construcciones, calles adoquinadas y sobre todo, sus antiguos zaguanes. Para las fotos de Instagram son una locura.
Esta ciudad es la más antigua del Nuevo Mundo, y el primer sitio conquistado por los españoles. Aquí se ubican los primeros recintos históricos edificados en América, como es el caso de la Catedral Primada de América, dedicada a Santa María de la Encarnación. El inicio de su construcción fue en 1512, y la arquitectura del edificio se caracteriza por el contraste de su arquitectura gótica y plateresca.
La iglesia se encuentra en la Plaza Colón, uno de los parques más lindos y representativos de Santo Domingo donde se reúnen familias, vendedores y grupos musicales que entonan ritmos dominicanos. El corredor que conduce a la plaza te lleva hasta El Conde, una calle peatonal arbolada donde hay tiendas de artesanías, restaurantes y souvenirs; todo queda a unos pasos así que te recomiendo caminar mucho.
Hace un momento que toqué el tema de la música recordé que en República Dominicana lo que más se escucha es la bachata y el merengue. A cualquier lugar al que vayas oirás a Juan Luis Guerra o a Romeo Santos, cantautores de bachata. En lo personal me gusta este género porque soy bien bailadora; además, me encanta que cada uno de mis viajes sean marcados por canciones que me provoquen un recuerdo. Cuando regresé, la rola que tooodo el tiempo tarareaba era El Niagara en Bicicleta, que por cierto tiene una historia muy peculiar porque según me explicaban, cuando los dominicanos tienen un mal día usan esta expresión y dicen algo así: “mi día estuvo complicado, pasé el Niagara en Bicicleta”. ¡Ahora entiendo todo!, jaja.
Después de caminar un ratito me moría de hambre y quería probar algo típico. Me recomendaron mucho el Mesón de Bari, un restaurante de comida criolla dominicana. El lugar está riquísimo y me latió mucho porque tienen una decoración muy bohemia, una barra tradicional, (para echarte unas cervecitas o un buen ron) y un ambiente cálido. De entrada pedí unos tostones, deliciosos plátanos fritos que acompañan muchos platillos de República Dominicana. Aquí mismo venden empanadas de yuca rellenas de pollo o mariscos. El plato fuerte y sumamente recomendable es el guisado de cordero. Me acuerdo del sabor y se me hace agua la boca.
En la misma calle del restaurante llamada Hostos, además de casas antiguas y edificios históricos están las Ruinas de San Nicolás de Bari, el primer hospital construido en América edificado en 1503 y convertido en ruinas debido a un fuerte terremoto que sufrió este país caribeño a mediados de 1900. Las ruinas están abiertas al público y no pagas ninguna cuota por entrar. Para las fotos está de lujo.
Los puros de República Dominicana son famosos por su calidad, por eso fui a Arturo Fuente Cigar Club, un bar en el que exclusivamente se va a fumar puros. El lugar tiene una decoración muy elegante, y un área para que elijas el puro de tu preferencia; tienen una gran variedad que depende de su añejamiento, colores y tamaños. La neta a mí no me gusta nada el puro, pero lo probé y aunque el resultado fue malo porque en lugar de retenerlo en la boca le di el toque, me divertí un buen. En este lugar puedes acompañar los cigarros con alguna bebida como el ron, pero cuidado porque con un puro y un chupe te pones ebrio en dos minutos, jeje.
La pasé increíble, pero lo que más me gustó de este país fue su gente. Neta son las personas más alegres que he conocido a lo largo de mis viajes. Su energía no sólo la canalizan para ser acelerados -que en lo personal me gusta y lo agradezco- también la usan para ser muy alegres, sonrientes y expresivos. Todo el tiempo están de buenas, hacen bromas, te toman de la mano con confianza, son serviciales, hospitalarios y muy eufóricos. Además son bien bailadores. Como se imaginarán así me despedí de Dominicana: con ron, puro, bailando y sonriendo.
3 cosas que debes saber de República Dominicana
1-Para todo aplican el «ya tú sabe» y «mi amol».
2-Si quieren hacer la conversión de pesos dominicanos a pesos mexicanos lo mejor es dividir todo entre 4. Es decir 100 pesos dominicanos son 25 pesos mexicanos.
3-Son especialistas en productos de belleza y tienen muchas marcas de diferentes productos, pero en lo que son excelentes es en fabricar tratamientos para el cabello que puedes comprar en el supermercado. Lo mejor es que son muy económicos. El mío me costó $25 pesos y dicen que es buenísimo, ya les platicaré.
Guía Práctica
¿Cómo llegar?
Para llegar existen dos vías: Panamá o Miami. Si no tienes visa americana tu mejor opción es la primera porque para volar sólo necesitas el pasaporte, en caso de ya la tengas es mejor que vueles por Estados Unidos.
Yo aterricé en el Aeropuerto Internacional Las Américas ubicado en la ciudad de Santo Domingo, pero dentro del país hay otros aeropuertos como el de Punta Cana al que igualmente puedes aterrizar. Lo que yo sugiero es conocer Santo Domingo, y después desplazarte en carretera a Punta Cana; la distancia es menor a dos horas.
Dónde hospedarse
Hotel Occidental El Embajador
Ubicación: Centro de Santo Domingo.
Tarifa: Desde $163 USD (Superior Deluxe Room)
- 1-800-123-1832
Hotel Billini
(Boutique)
Ubicación: Calle Padre Billini #256-258, Zona Colonial, Santo Domingo, República Dominicana
- +1 (809) 338 40 40
Tarifa: $228 USD por noche.
Web: hwww.billinihotel.com
Santo Domingo Bed and Breakfast
Ubicación: Calle Bernardo Pichardo, #11, Gazcue, Santo Domingo, República Dominicana.
Distancia desde el centro: 0.6km
T.+1 (809) 807-7210
Tarifa: $205 MXN
Más opciones de hostales: www.hostels.com
Dónde comer
Mesón de Bari:
Calle Hostos, República Dominicana
+1 809-687-4091